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jueves, 4 de septiembre de 2014

EXISTE RIESGO REAL DE UNA EPIDEMIA DE EBOLA?

“A consecuencias de esta estrategia, la población de Atenas se habÍa cuadruplicado con los refugiados, muchos de los cuales vivÍan hacinados en precarias chozas improvisadas, situación que creó en la capital del imperio y su puerto las condiciones ideales para el ataque de un enemigo mucho mas peligroso que el ejercito de Arquidamo, rey de Esparta”
Que fue la plaga en Atenas?
Rev.chil.infectol. vol.28 no.4 Santiago ago.2011

No discutiremos sobre el agente etiológico de la plaga en Atenas, porque de el análisis de los síntomas descritos por Tucídides se puede pensar en diferentes agentes etiológicos (diagnóstico diferencial en medicina y de los cuales se han reportado más de 20 en los análisis históricos de la Plaga de Atenas). Pero lo que si podemos discutir son las condiciones sociales de las diferentes comunidades que se convierten en riesgo no solo para el virus del Ebola, sino para cualquier enfermedad, infecciosa o no, que pueda afectar a grandes grupos poblacionales. Dentro de las condiciones sociales podemos citar la parte ambiental, laboral y de servicios de salud principalmente.

Si es cierto que la humanidad siempre le ha tenido temor a las epidemias y por lo tanto a la muerte. Es ese temor el que ha dado origen al estudio de la enfermedad, su etiología, prevención y control. En lo referente a la prevención y control, desde el punto de vista de salud pública, es una función del estado, la cual en el caso de nuestro país Colombia, como en muchos otros países del mundo, es deficiente o nula en muchos sectores marginados. El punto de control por parte de medicamentos y/o vacunas es similar: no toda la población tiene acceso a medicamentos o vacunas, debido a que es el grande negocio de la industria farmaceútica. Entonces donde está la igualdad social y la cobertura universal de los sistemas de salud?

Desde la época de Hipócrates, considerado el padre de la medicina, se conocen los factores de riesgo que desencadenan las epidemias y que se encuentran descritos 5 siglos antes de Cristo: se controló una epidemia de “mal aire” (conocida en el mundo moderno como malaria) por desecación y/o control de los pantanos. Esa actividad la conocemos ahora como saneamiento ambiental, estrategia aplicada en la Florida, USA, para erradicar las epidemias de fiebre Amarilla y dengue. Esta misma estrategia fue aplicada por los norteamericanos de la Compañía Frutera de Sevilla, en la zona bananera del Magdalena para erradicar la epidemia de malaria, desde mucho antes de cometer la Masacre de las Bananeras en 1928. Se describió el mayor riesgo de adquirir enfermedades de transmisión sexual durante la actividad sexual en el periodo menstrual de las mujeres (hoy sabemos que la transmisión de gonorrea y el virus de Inmunodeficiencia Humana tienen mayor riesgo de contagio durante este periodo). También se describieron los buenos hábitos de higiene, alimentación y el beneficio de consumir agua potable.
Los factores de riesgo citados en el párrafo anterior, además del hacinamiento descrito en el relato de la Plaga de Atenas, son los mismos factores de riesgo en el mundo moderno para adquirir enfermedades de carácter epidémico. Lo grave es que conocemos las estrategias de control, pero no la ejecutamos. Conocemos los diagnósticos ambientales y sociales desde hace muchos años y no los intervenimos.
Veamos algunos ejemplos:
Si es cierto, o al menos es lo aceptado actualmente, que muchas de estas enfermedades provienen del Africa, o son de origen selvático. Muchas de estas patologías mantenían su ciclo en la selva, pero la intromisión del humano en este medio por intereses comerciales, pero sin la debida protección del trabajador, la necesidad de alimento de muchas comunidades pobres, o el desplazamiento forzado, llevo a que esas enfermedades circunscritas al área selvática y con reservorios animales, las tenemos ahora en las áreas urbanas con reservorios humanos.
Las situaciones de hacinamiento y falta de agua potable es el factor común donde se presentan las grandes epidemias. Como es posible que en el mundo actual existan comunidades sin acceso al agua potable? Como es posible que Colombia, uno de países más ricos del mundo en fuentes hídricas, este año este sufriendo de sequia en muchas ciudades? Veamos el ejemplo de Santa Marta: en los reportes del Comité de Higiene de Santa Marta de 1914, se pronosticó que el río Manzanares sería insuficiente para suplir de agua a la comunidad en los siguientes años, al igual que se prevenía sobre la contaminación del mismo río. Desde esa época se hizo la propuesta de protección de las márgenes del río y el transvase del río Piedras. Hoy, 100 años más tarde, tenemos la sequia más grande de la historia de Santa Marta y contaminado el río Manzanares por falta de intervención del estado. La excusa es el fenómeno del Niño, pero en las antíllas holandesas, donde vivo actualmente, no carecemos de agua en ningún momento. Y para reirse, ninguna de las islas (Aruba, Bonaire, Curacao, Saint Maarten, Saba, Saint Eustatius) tiene rio ni lagos de agua dulce!

El otro punto importante son los transportes modernos (aéreo y marítimo) quienes nos pueden desembarcar en nuestro territorio personas que vienen incubando la enfermedad o vectores infectados que se domicilian en nuestros territorios. Para protección, los organismos internacionales crearon el Reglamento Sanitario Internacional, el cual incluye vigilancia epidemiológica, notificación inmediata de eventos de importancia en salud pública y el control de los puertos (puntos de entrada). Desafortunadamente todos los países no cumplen con estas exigencias o lo hacen en forma deficiente.

Volvamos a la pregunta inicial:
Existe riesgo real de una epidemia de Ebola?
La respuesta es SI! Y no solo de Ebola, sino de cualquier otra patología transmisible como por ejemplo otra epidemia por Virus de Inmunodeficiencia Humana pero tipo II, el cual circula en Africa!


Cesar Ponce MD.
Microbiólogo y Parasitólogo. Epidemiólogo
Curacao, 16 de Agosto de 2014