LOS INVESTIGADORES SE RETRACTAN Y ATRIBUYEN LA CONFUSIÓN A UNA VERGONZOSA FALTA DE COMUNICACIÓN
Laura Marcos
28/02/2020
Ante la rápida expansión del nuevo coronavirus, los científicos investigan a contrarreloj para encontrar pistas sobre su epidemiología, que ayudarán a perfeccionar tanto una vacuna como las vías de tratamiento y prevención.
El pasado siete de febrero, investigadores de Guangzhou, en China, sugirieron que los pangolines, mamíferos de hocico largo, serían una fuente animal muy probable de donde procedería el brote del 2019-nCoV, nuevo coronavirus que se detectó en humanos por primera vez el pasado mes de diciembre en Wuhan. La propuesta se basó en la similitud de la secuencia genética de coronavirus tomados de los animales y de los humanos, que eran un 99 % similares.
No obstante, el mismo equipo científico ahora rectifica. Después de un nuevo examen de los datos, junto con otros tres estudios realizados sobre el genoma del coronavirus de pangolín publicados la semana pasada, han llegado a una nueva conclusión: aunque el animal sigue siendo un contendiente, el misterio está lejos de resolverse.
Entonces, ¿a qué se refería esa coincidencia del 99 %? Lo que ocurrió es que, en realidad, el resultado no se refería a todo el genoma, sino que se relacionó solo con el dominio de unión al receptor (RBD). Los autores han explicado esta confusión en nuevo estudio publicado el pasado 20 de febrero. En él, achacan este malentendido a una grave falta de comunicación.
En palabras de Xiao Lihua, parasitólogo de la Universidad Agrícola del Sur de China y coautor del artículo: “El informe de la conferencia de prensa fue el resultado de una falta de comunicación vergonzosa entre el grupo de bioinformática y el grupo de laboratorio del estudio".
El dominio de unión al receptor o RBD es lo que les permite engancharse y entrar en una célula. Por ello, es una parte crucial. Pero que dos coronavirus (del pangolín y del ser humano) presenten una similitud tan alta no quiere decir que estén vinculados. Para ello, habría que secuenciar todo el genoma. Ahí residió, al parecer, el embarazoso malentendido.
Según Linfa Wang, viróloga de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Singapur de Duke, que formó parte del equipo que descubrió el origen del virus del SARS: “Una similitud del 99% entre los RBD de los dos virus no es necesariamente suficiente para vincularlos”.
¿Qué dicen ahora los científicos sobre el pangolín como huésped?
Una comparación posterior de todo el genoma descubrió que el pangolín y los virus humanos comparten el 90,3% de su ADN.
Los tres nuevos estudios sobre el genoma del pangolín publicados la semana pasada revelaron que los coronavirus en muestras de células de pangolín compartían entre el 85,5 % y el 92,4 % de su ADN con el coronavirus encontrado en humanos.
Otros dos artículos publicados el 20 de febrero, que también estudiaron el coronavirus en pangolines, concluyeron que los virus fueron entre un 90,23% 3 y 91,02 % similares al coronavirus que causa el COVID-19.
Una similitud que no es suficiente para identificar al pangolín como huésped transmisor y, desde luego, mucho menor del 99 % reportado en el estudio del 7 de febrero.
El ejemplo del SARS y las civetas
Tomemos un ejemplo de estudios similares en otro tipo de coronavirus: cuando se identificó en 2002 el primer caso de infección por el SARS-CoV en humanos, los científicos señalaron a la civeta (mamífero carnívoro parecido a los gatos) como transmisor de este tipo de coronavirus en humanos. En este caso, la coincidencia del genoma del SARS-CoV en civetas y humanos era del 99,8 % razón por la cual se consideró como el huésped.
¿Qué sabemos sobre el posible huésped transmisor del nuevo coronavirus?
Hasta ahora, la coincidencia más cercana al 2019-nCoV humano se ha encontrado en un murciélago en la provincia china de Yunnan. Un estudio publicado el 3 de febrero descubrió que el coronavirus del murciélago compartía el 96 % de su material genético con el virus que causa el COVID-19.
Los murciélagos podrían haber transmitido el virus a los humanos, pero existen diferencias clave entre los RBD (lo que les permite engancharse y entrar en una célula) en los dos virus. Esto sugiere que el coronavirus del murciélago no infectó directamente a las personas, pero podría haberse transmitido a través de un huésped intermedio. Para este huésped, un estudio publicado en enero por la revista Journal of Medical Virology especulaba con dos serpientes comunes en el sureste de China, la krait pluribanda (Bungarus multicinctus) y la cobra china Naja atra.
Pero no hay datos concluyentes, y este huésped intermedio está, todavía, sin identificar.
Referencia bibliográfica:
Kangpeng Xiao, Junqiong Zhai, Yaoyu Feng, Niu Zhou, Xu Zhang, Jie-Jian Zou, Na Li, Yaqiong Guo, Xiaobing Li, Xuejuan Shen, Zhipeng Zhang, Fanfan Shu, Wanyi Huang, Yu Li, Ziding Zhang, Rui-Ai Chen, Ya-Jiang Wu, Shi-Ming Peng, Mian Huang, Wei-Jun Xie, Qin-Hui Cai, Fang-Hui Hou, Yahong Liu, Wu Chen, Lihua Xiao, View ORCID ProfileYongyi She. Isolation and Characterization of 2019-nCoV-like Coronavirus from Malayan Pangolins. Doi: https://doi.org/10.1101/2020.02.17.951335
martes, 31 de marzo de 2020
DESCARTAN AL PANGOLÍN COMO HUÉSPED TRANSMISOR DEL NUEVO CORONAVIRUS EN HUMANOS
Etiquetas:
TEMAS GENERALES DE MICROBIOLOGÍA